Células mesenquimales: aplicaciones en el tratamiento de lesiones y traumatismos
FCells Team
1jun. 28, 2024
Las células madre mesenquimales (MSC) actualmente son las protagonistas de un cambio de paradigma revolucionario en la medicina regenerativa, particularmente en el tratamiento de lesiones, traumatismos y el desgaste asociado a la edad.
Su capacidad para diferenciarse en una variedad de tipos celulares altamente relevantes en la regeneración las convierte en una herramienta invaluable para la reconstrucción de tejidos dañados, especialmente el tejido óseo y el cartílago, que son críticos en el contexto de lesiones deportivas, accidentes y condiciones degenerativas.
Las células madre mesenquimales pueden obtenerse tanto en el nacimiento como en la edad adulta, Hoy veremos cuáles son los procesos de extracción y cultivo, así como sus aplicaciones más importantes.
¿Células mesenquimales: por qué son tan especiales en la medicina regenerativa?
Una de las propiedades más notables de las células mesenquimales, que pertenecen al universo de las famosas células madre, es su capacidad para diferenciarse en una variedad de tipos de células especializadas, incluidas las que forman hueso (osteoblastos), cartílago (condrocitos) y músculo (miocitos). Las MSC pueden replicarse a sí mismas varias veces sin perder sus características, lo que permite obtener un número suficiente de células para tratamientos de regeneración celular a partir de una pequeña muestra inicial. Esta capacidad de auto-renovación asegura una fuente sostenible de células para aplicaciones terapéuticas que incluso puede venir del cuerpo del propio paciente.
Además, las MSC tienen la capacidad de modular el sistema inmunológico, lo que las hace útiles en el tratamiento de enfermedades autoinmunes y en la prevención del rechazo de trasplantes. y reducir la inflamación, creando un entorno más propicio para la regeneración de tejidos.
Cuando se utilizan MSC autólogas (obtenidas del mismo paciente), el riesgo de rechazo inmunológico es prácticamente nulo. Incluso en el caso de MSC alógenicas (de un donante a otro paciente), su capacidad inmunomoduladora puede minimizar las respuestas inmunitarias adversas, lo que las hace más seguras que otros tipos de trasplantes celulares. Se puede obtener una muestra autóloga de estas células de diversas fuentes como la médula ósea, el tejido adiposo y el cordón umbilical,
Extracción y cultivo de células mesenquimales en adultos
La recolección de células madre mesenquimales (MSC) en adultos también es posible, y se efectúa mediante diversas técnicas, incluyendo la aspiración de médula ósea o la extracción de tejido adiposo mediante un procedimiento similar a la liposucción, pero en menor escala.
Una vez obtenidas, estas muestras son enviadas a laboratorios altamente especializados para su procesamiento, como el laboratorio de Fcells. En estos laboratorios de última tecnología, las MSC son cuidadosamente separadas de otros componentes celulares y tejidos, y luego se cultivan en ambientes controlados diseñados para replicar las condiciones biológicas óptimas del cuerpo humano.
Este proceso de cultivo no solo facilita la multiplicación de las células, sino que también las prepara para su posterior aplicación en tratamientos regenerativos, asegurando que mantengan su potencial terapéutico y regenerativo.
Aplicaciones del tratamiento con células mesenquimales
Las MSC se están investigando y utilizando en una amplia gama de aplicaciones, desde la reparación de tejidos dañados y la ingeniería de tejidos hasta el tratamiento de enfermedades inflamatorias, autoinmunes y degenerativas. Su capacidad para secretar factores bioactivos que promueven la curación y regeneración de tejidos amplía aún más su potencial terapéutico.
El cartílago, especialmente el que se encuentra en las articulaciones, tiene una capacidad limitada de autorreparación. Las MSC son particularmente prometedoras para la regeneración de cartílago, que es muy comúnmente afectado en lesiones deportivas, accidentes y debido al desgaste por la edad.
Como ya mencionamos, estas células tienen la capacidad única de diferenciarse en osteoblastos, que son células formadoras de hueso, y condrocitos, que son células formadoras de cartílago, ofreciendo así una solución regenerativa para lesiones que anteriormente se consideraban difíciles de tratar o para las cuales solo existían tratamiento paliativos, sin esperanza real de recuperación.
Los tratamientos con MSC pueden resultar en una recuperación más rápida y completa de lesiones y traumatismos, reduciendo significativamente los tiempos de rehabilitación. Los pacientes pueden esperar una mejora en la funcionalidad y una disminución en el dolor de las áreas tratadas, con el potencial de restaurar completamente la integridad de los tejidos dañados.
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